En España, contamos con miles de trabajadores autónomos. Éstos, tienen que hacer frente a diferentes pagos, aunque no siempre es sencillo hacerlo. Por eso, es importante saber que existen determinadas deudas que pueden aplazar los autónomos de nuestro país. Hablamos de ello en nuestro blog de Andrés Jiménez.

Deudas que pueden aplazar los autónomos en España

Los autónomos en España pueden aplazar el pago de ciertas deudas con la Seguridad Social y la Agencia Tributaria, siempre que cumplan con ciertos requisitos.

Por un lado, actualmente, los autónomos pueden aplazar deudas con la Seguridad Social que no superen los 50.000 euros, sin necesidad de presentar garantías o avales. El límite anterior era de 30.000 €.

Por otro lado, también pueden aplazar el pago del Impuesto sobre Sociedades.

Entre los pagos fraccionados y liquidaciones trimestrales aplazables, está el IRPF o Impuesto de la Renta de las Personas Físicas. Puede hacerse tanto en estimación objetiva (en módulos), como en estimación directa.

También puede aplazarse el modelo 303, correspondiente a la Declaración Trimestral de IVA.

Deudas que no pueden aplazarse

Hoy en día, no pueden aplazarse determinadas deudas.

Es el caso de las retenciones a cuenta, correspondientes a los modelos 111, 115 y 123.

Tampoco pueden aplazarse los pagos fraccionados del Impuesto sobre Sociedades.

Finalmente, los autónomos tampoco pueden aplazar las ejecuciones de resoluciones firmes desestimatorias.

Requisitos para poder solicitar aplazamientos

Una vez conocidas las deudas que pueden aplazar los autónomos, es importante saber cuáles son los requisitos para solicitar los aplazamientos.

Primeramente, estar al corriente de pago con la Seguridad Social y Hacienda en el momento de la solicitud.

En segundo lugar, no tener embargos en curso.

A la vez, deben acreditar que existe una causa de fuerza mayor que les impida el pago de la deuda en los plazos habituales.

Finalmente, deben presentar la debida solicitud dentro de los plazos establecidos.